entre la niebla
se filtra tu sonrisa.
(Este haiku es de inspiración propia)
Una vez que os he hablado del juego de la tocha, como no podía ser de otra manera, paso a contar algo sobre la ceremonia del té, y digo bien "algo" porque es sumamente extenso hablar sobre ello, y para hacerlo con propiedad, casi que hay que ser todo un experto, y evidentemente una no llega ni de lejos a ese calificativo.
El origen se situa en la Edad Media,cuando el juego de la tocha pasa a ser practicado por las clases más pudientes y samuraís y le confieren un transfondo taoísta de filosofía Zen.
Los cuatro elementos que se representan en dicha ceremonia son:la armonía, la reverencia, la pureza y la calma.
Llevar a cabo este ritual es como adentrarse en un laberinto, por lo que debe ser conducido por el anfitrión, que será un buen conocedor del mismo, así como del arte y la filosofía... y con suma habilidad irá introduciendo a los invitados en un mundo mágico de una refinada sencillez.
El té que habitualmente se toma en este rito es el Matcha. Un té verde pulverizado, que dá una infusión de color jade.
El protocolo es sumamente complicado como para explicarlo en unas breves palabras.
La sala donde se celebra el acontecimiento ha de estar decorada de manera apropiada con un discreto centro floral o una lámina de estilo zen.Los elementos que hay en ella son naturales, hechos de bambú, madera, barro... antiguamente se realizaba en una casita que los amantes del té tenían para esta ceremonia en su jardín, y cuando la persona fallecía se quemaba también su casa de té.
El anfitrión prepara el té batiéndolo en agua caliente con un batidor debambú llamado "Cha Sen". La medida del té se obtiene a partir de una especie de cuchara llamada "cha sa ku".Nunca debe de batirse este té con un elemento metálico. El té se sirve en cuencos, nunca en tazas con asas.Cada cuenco es especial, teniendo su propio nombre: nube de agua, rocio de la mañana...Generalmente tienen algún tipo de de decoración y antes de tomar el té hay que admirar este detalle haciendo un gesto de aprobación o admiración. El bol se coge siempre con la mano derecha. Cuando el invitado ha tomado su té se queda unos minutos en silencio saboreando lo que ha tomado contemplando el fondo del cuenco.Una vez que se ha probado el té es de buena consideración preguntar el origen y la variedad de la planta. El bol se va pasando al resto de invitados.
La manera de entrar en la sala y colocarse es también ceremonial. Hay que descalzarse y utilizar calcetines blancos. Con el té suele servirse algún tipo de dulce presentado de forma especial en una bandeja dedicada para este menester.
Los movimientos en esta ceremonia son muy importantes, y es muy curioso porque hay que mover los elemento ligeros como si fuesen pesados, y se tiene muy en cuenta el manejo de las manos, de tal manera que siempre se tienen que dirigir como cerrando círculos para trabajar de este modo la energia y que esta no se disperse. Esto le confiere a la cermonia del té una suprema elegancia.
A grosso modo, esto sería una reseña sobre la ceremonía. Tanto en China como en Japón suele estudiarse como una carrera universitaria. En cada región de China tienen su propio ritual y sus tés especifícos para practicarla, como por ejemplo el Oolong, que es un té semifermentado llamado también té azul.
Cualquiera de estos tés, así como el batidor de bambú y el cha sha ku podeís encontrarlos en Tishana,(son los de la foto) y ya os explicaré también como batir el matcha porque hay que hacerlo de una forma determinada. LLevar a cabo todo el ritual puede suponer de 4 a 6 horas. De momento no estoy preparada para ello, pero ya os avisareeeé, tengo que practicar mi pacienciaaa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario