Cada capullo de té está formado por varias hojas y flores secas, que son liadas y atadas con un cordel de algodón. Cuando este capullo en forma de bola infusiona, se abre la flor que encierra dentro: caléndula, tamarindo,jazmín, lirio....
Estas bolas se elaboran totalmente a mano y tanto las hojas como las flores llevan su proceso de selección. Las hojas provienen de un arbusto llamado Dai Bai Cha. Generalmente el té que se emplea es blanco, pero también puede ser de otro tipo. La selección de la flor es importante no sólo por su belleza, sino también por el aroma y el sabor que aportan al té. De cada flor se pueden hacer como con cualquier té hasta 3 infusiones, y no pasa como en otros que con los minutos de infusionado amargan, ya que aquí ese tiempo es necesario para que la flor se abra.
Las propieedades son las de cualquier otro té normal, sólo que aquí estás tomando también un pedacito de arte.
Estas son las bolas antes de abrirse, se le llama también capullos o perlas, esto desde luego es mucho más delicado que bola.... y ya que es un auténtico arte, que menos que mencionarlas como debidamente se merecen.
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